Era un jueves normal en el Distrito Federal, me levanto a las 7:30 de la mañana, voy a la uni, no viene el profesor y voy a filosofía a las 11 por que había quedado con Antonio.
La idea era
bebernos unas
chelas en la calle hasta las 13:00 que
salían Erlantz y Squirt de clase para comer e ir a
Coyoacan, al museo de
Frida Kahlo y al de
Leon Trostky.
Así que voy a con Antonio a comprar una cartera y un bolso (muy bonitos por cierto
jejeje) y
después a
Copilco. Compramos unas
litronas y le suena el
movil a Antonio, que
Erlantz y Squirt tampoco
tenían clase y se
venían a beber un rato antes de ir a los museos.
A eso de las 13:15, mientras
bebíamos en la calle, han aparecido unas patrullas de
policía, se han bajado unos 20, completamente uniformados y con las ametralladoras en la mano, nos han rodeado a nosotros y
algún grupo mas que estaba bebiendo, nos han levantado y nos han llevado a unas furgonetas. Todo esto mientras nos apuntaban con las ametralladoras.
Nos montan en la parte de
atrás de la
furgona y se suben dos
policías para que no escapemos.
Nos han movido un rato por
DF y
después nos han llevado a un aparcamiento de un
McDonald.
Allí creíamos que nos iban a pedir una mordida (soborno) pero no, resulta que todo era un operativo (para justificarse el sueldo o algo
así...) y estaba un
jefazo, por lo cual, no
podíamos sobornarles.
Nos han bajado de la furgoneta, nos han pedido datos y nos han hecho fotos de la cara.
Tras esto nos llevan a una comisaria y tras tenernos un rato hacen un examen medico a algunos de los arrestados. A Antonio, una chica, dos trabajadores de la
UNAM y a mi nos han tenido esperando mientras a el resto les
metían a los calabozos. Nos tiene un rato esperando y nos dicen que
están esperando a que venga otro medico y nos haga el reconocimiento a nosotros.
Mientras tanto me pongo a hablar con un
policía y me he
reído bastante cuando ni corto ni perezoso, delante de todo el mundo salta: "Si por mi fuera, me dabais 100 pesos cada uno y os dejaba libres".
Tras un rato esperando nos dicen que no va a aparecer
ningún medico,
así que nos llevan a otra comisaria para que nos mire otro. Mientras nos llevan, la
policía mexicana hace alarde de su seriedad y se iban chocando entre dos coches cada vez que paraban en un
semáforo. De lo malo malo nos hemos
reído bastante.
Además,
íbamos saludando a los coches desde la parte de
atrás de la patrulla.
Una vez llegamos a la otra comisaria nos ponen a esperar al reconocimiento medico (4 o 5 horas
después del arresto) junto a dos chavales que
habían robado a una tipa y un grupo que les
habían pillado robando en un supermercado.
El reconocimiento medico a sido de lo mas
subrealista que he visto en mi vida, me pasan a una sala con una señora,
allí me pregunta que
había estado haciendo. Le comento que
estábamos chupando en
Copilco, que no nos
había dado tiempo ni a tomar 4 tragos cuando a llegado la tira. Entonces, se acerca y me hace la gran prueba, me dice, sople su aliento por favor, le soplo el aliento y me dice: "
Ufff, pues si que
huele a alcohol!"
Yo ya estaba
flipando, intento convencer a la
tía que es imposible, que le he dado cuatro tragos hace cinco horas, que he comido
doritos y que es imposible que
huela a alcohol. Por supuesto, la
tía no ha echo ni puto caso.
Así que nos han vuelto a llevar a la otra comisaria y nos han encerrado en el calabozo junto al resto de personas arrestadas.
Como dato curioso, en todas las celdas,
había unas 15 personas detenidas por beber en la calle, un hombre por fumar mota y dos por robar un coche. Eso, en lo que se supone una de las ciudades mas peligrosas!!! ¿Donde estaban los delincuentes? ¿Donde los ladrones? ¿Secuestradores? En fin...
Bueno, una vez en las celdas,
practicamente no nos han informado de nada, ni leer derechos, ni nos han dicho que pasaba ni nada,
incomunicación practicamente total si no llega a ser por que
teníamos moviles dentro.
Al de un rato, se ha acercado una mujer y nos ha dicho que nos iban a juzgar ahora, que nos
enfrentábamos a una multa entre 1100 y 1500 pesos (1 euro = 16,8 pesos) o un arresto de entre 25 y 34 horas.
Antonio a llamado a su madre y gracias a sus gestiones nos han soltado a eso de las 22:00-22:30 con una multa de 50 pesos.
Aunque parezca que todo esto ha sido muy
chungo, realmente nos hemos
reído bastante salvo cuando
llevábamos unas horas en las celdas sin saber nada, entonces si que nos agobiamos un poco.
Como dato curioso he hecho fotos con mi
móvil, se ven un poco mal pero bueno, es lo que hay de momento:
Cuando
volvíamos a casa, un vagabundo nos ha alegrado la noche al verle
masturbándose en medio de la calle.
En fin amigos... esto es
Mexico!